
26Dic
Me gusta el campo
26/12/2022 - Ignacio Iriarte
Los precios de la hacienda perdieron la final 2022 contra los costos
En los últimos 12 meses,
entre diciembre del 2021 y el presente mes, y mientras la inflación (IPC) fue
del 96 por ciento, el precio del novillito (300 a 390 kilos ) subió un 30 por
ciento, el del novillo Hilton un 28 por ciento, el de la vaca conserva buena un
37 por ciento y el del ternero de invernada lo hizo sólo un 18 por ciento.
En
el mismo período, el tipo de cambio neto para la carne vacuna se incrementó un
63 por ciento, mientras que un índice de insumos ganaderos ponderado (personal,
praderas, verdeos de invierno, silo de maíz, confección de rollos, maíz,
alambre, gasoil) creció 95 por ciento en pesos y un 19 por ciento en dólares
oficiales.
El
costo de un plan sanitario para una explotación de cría subió un 85 por ciento,
mientras que la vacuna contra la aftosa lo hizo un 99 por ciento.
El
resultado de la explotación de un campo de cría alquilado (420 hectáreas), en
los últimos 12 meses pasó de 2,7 millones de pesos de ganancia a 1,8 millones
de pesos anuales, y la rentabilidad sobre el capital invertido en dicha
explotación bajó del 15 por ciento en diciembre del 2021 al 3,70 por ciento en
diciembre del 2022.
El
costo de producir un ternero, en campo alquilado, que era de 215 pesos por kilo
en diciembre del 2021, ahora es de 343 pesos (representa 60 por ciento más).
Varios insumos ganaderos han
crecido por arriba del promedio: el maíz (111 por ciento), la confección del
silo de maíz (103 por ciento), el gasoil (120 por ciento) y el alambre (107 por
ciento).
Consumo
Si
se multiplica el consumo per capita por el precio de la carne al mostrador, o
sea calculando el gasto de los consumidores en carne vacuna, para el período
2003-2021, observamos que el gasto actual en términos reales se ubica un 18 por
ciento por debajo del promedio del período mencionado, y un 28 por ciento por
debajo del correspondiente a diciembre del año pasado.
El consumo per capita
actual, unos 48 kilos, se ubica 20 por ciento por debajo de la ingesta promedio
de los años 2003-2021, mientras que el precio actual de la carne al mostrador
resulta un dos por ciento más alto que el promedio de dicho período.
En
los últimos 12 meses se observa una suba del precio de la carne al mostrador
del 44 por ciento, frente a una inflación del 98 por ciento, y una estabilidad
del consumo per capita en el orden de los 48 a 49 kilos equivalente anual.
La
serie de gasto anual en carne vacuna (en pesos a diciembre de 2022) comienza en
2003 con el valor más bajo del período, con unos 46 mil pesos, después de la
devaluación del 2002.
Luego
va mejorando durante toda la década, hasta tocar el máximo nivel en 2010, con
74 mil pesos de hoy de gasto anual en carne vacuna.
Este
índice baja a lo largo de la década de 2010, hasta tocar un piso en el 2019 de
51 mil pesos.
El
gasto se recupera en los años 2020 y 2021, con precios reales al mostrador muy
altos y una ingesta inflexible a la baja.
El
gasto, que llegó a los 68 mil el año pasado, comienza a caerse a partir de mayo
de 2022, hasta tocar un valor de 49 mil pesos (equivalente anual) en diciembre
de 2022, siempre a moneda constante.
El
derrumbe actual del gasto de los consumidores es resultado de la combinación de
un fuerte atraso en el valor real de la carne al mostrador, con una ingesta
apenas por encima de los niveles de un año atrás.